Valenzuela es de la promoción arbitral 1989. Al año siguiente ya llegó a Primera, siendo línea, mientras que en 1991 debutó en la máxima categoría como juez principal. En el ‘95 alcanzó el premio mayor, al recibir la insignia internacional de la FIFA. Iba por buen camino, hasta que una lesión le cortó las alas. Por su deseo de seguir creciendo, aprovechando su buen momento, dejó pasar un pequeño dolor, hasta que sufrió una rotura del tendón rotuliano izquierdo. Tardó siete años en volver a Primera.
Alcanzó de nuevo su nivel, dirigiendo un par de clásicos, hasta que recibió un castigo por su vestimenta fosforescente, que se consideró entonces "inadecuada", que sin embargo tiempo después se convirtió en una moda.
Actualmente es directivo de fútbol femenino de Cerro Porteño, donde juega su hija Talía Belén, razón por la cual aceptó el puesto.
Fuente: ABC
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